Para profundizar esta labor, la Secretaría de Estado de Innovación y Desarrollo Tecnológico del Gobierno de Tucumán (Sidetec) impulsó la firma de una Carta Acuerdo de Colaboración Científico Técnica que promoverá el desarrollo de actividades destinadas a la reproducción del patrimonio arqueológico a través de la tecnología de impresión 3D. Un convenio celebrado en la Reserva Experimental de Horco Molle (Rehm) que se concretó en conjunto con la la Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo y la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología de la Universidad Nacional de Tucumán, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) de Tucumán y el Ministerio Pupilar y de la Defensa.
El subsecretario de la Sidetec, Roberto Tagashira, expresó que la iniciativa nació tras una experiencia de trabajo desarrollada días atrás cuando arqueólogos de la Reserva pidieron a la repartición provincial el nexo con técnicos en impresión 3D que pudieran brindar su colaboración para estudios científicos.
De esta manera, dijo el funcionario, “se contactó con el especialista indicado que es el que más sabe en la materia en Tucumán” y señaló que en un día obtuvieron resultados de calidad tras aplicar esta tecnología a muestras arqueológicas: “vimos la importancia que esto podía tener tanto en sus aplicaciones en el sistema sanitario, pericias judiciales, en patrimonio arqueológico y en educación”.
La posibilidad de hacer reproducciones de forma rápida, exacta y precisa es valioso por sus múltiples aplicaciones en un sinfín de disciplinas. Para su ejecución, se emplean conocimientos de computación, fotométrica y mecánica.
Norma Nasif, vicedecana de la Facultad de Ciencias Naturales, explicó que este convenio involucra los trabajos que se puedan hacer en la digitalización de elementos arqueológicos y de biología forense que son estudiados por científicos y operadores judiciales en distintas investigaciones.
“Impulsado por la Sidetec, este marco servirá para que estas investigaciones sean potenciadas y puedan continuar realizándose con el apoyo de los profesionales de la Facultad que aportarán todo su saber”, razonó.
Eduardo Martel, vicedecano de la Facet, observó: “nosotros podemos aportar en la preproducción de volúmenes tanto de valor forense como arqueológico con la tecnología que tenemos a disposición. Estamos abriendo un gran abanico de posibilidades para el desarrollo de futuros proyectos”.
Impresión 3D
La tecnología consiste en tomar muestras digitales de elementos reales para reproducirlos con alta precisión en cuanto a texturas, volúmenes y formas. Una réplica exacta que sea representativa de la muestra original. La aplicación de esta técnica hará posible lograr réplicas de muestras óseas, reconstruir cráneos que podrían servir para hacer modelaciones faciales y reconocimiento de rostros.
El ministro Pupilar y de la Defensa, Washington Navarro Dávila, destacó la trascendencia para la Justicia de las novedades en digitalización de elementos que pueden servir en medicina forense y la reconstrucción en imágenes 3D de evidencias para evitar la manipulación de las muestras.
“Nos interesa porque al ejercer la defensa penal, nos resultan muy útiles estas herramientas para esclarecer los hechos y determinar responsabilidades penales” y aseveró que más del 60 % de los usuarios del servicio de justicia recurren a la defensa pública.
Reserva Experimental de Horco Molle
Juan Pablo Juliá, director de la Rehm, explicó que en el pedemonte tucumano se encontraron restos arqueológicos y esta tecnología permitiría montar exposiciones en la Reserva a partir de los hallazgos y las colecciones privadas que pueden ser dadas a conocer al público.
Abrir puertas a la ciencia
María Gloria Colaneri, docente del área de Arqueología y Museo de la Rehm, explicó que cuando llega un material con riesgo de preservación con la técnica de superposición fotográfica se logra un modelo exacto al original.
Así, a partir de su digitalización, se puede continuar con diversos estudios. Un documento que puede subirse a plataformas virtuales para que esté a disposición del mundo científico y la comunidad para su análisis e impresión.
“Es una manera fácil, barata y rápida de poder hacer interconsulta con profesionales de otros países” y dijo que esta tecnología es utilizada para recrear piezas de museos de otros países con fines educativos y científicos: “para la educación escolar es una manera muy fácil de enseñar el patrimonio”.
Sobre los elementos arqueológicos, cerámicas y huesos expuestos en la Rehm, se hicieron estudios métricos, morfológicos, determinaciones de sexo, edad, análisis clínicos y bioquímicos en el caso de piezas óseas.
