Una joven santiagueña fue condenada ayer en un juicio oral a prisión perpetua por arrojar a su hija recién nacida a un basural y causar su muerte en la localidad de Pinto, en la provincia vecina, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Antonella López (20), quien terminó admitiendo su responsabilidad en la muerte de la beba, a la que envolvió en una remera y otros trapos para introducirla en una bolsa y arrojarla a la basura. El hecho provocó el repudio en la localidad santiagueña a la vez que causó una enorme conmoción en los pobladores.
En la ronda de alegatos, los fiscales Andrea Darwich y Martín Silva pidieron una condena a prisión perpetua para la mujer que arrojó a su hija recién nacida a un basural, mientras que el abogado defensor, Gabriel Toloza, pidió una pena atenuada de 8 años de cárcel y que se tuviera en cuenta a modo de atenuante y consideración que la acusada es madre de un niño de 4 años.
Durante el juicio oral, los fiscales hicieron referencia a la confesión de la acusada, que admitió su responsabilidad en la muerte de la beba, a la que envolvió en una remera y otros trapos para introducirla en una bolsa y arrojarla a la basura. En el mismo debate el forense Horario Alfano indicó que la beba nació con vida y que horas más tarde falleció de hipotermia a consecuencia del frío.
Tras escuchar los alegatos, el tribunal integrado por los camaristas Julio David Alegre Paz, Alfredo Pérez Gallardo y Julio Carmelo Vidal, pasó a un cuarto intermedio y en horas más tarde dieron a conocer la condena a prisión perpetua.
Poco antes de dictarse el fallo, la joven López se mostró arrepentida por matar a su hija y clamó mirando al cuerpo colegiado una nueva oportunidad.
La mujer, que vivía en el barrio Islas Malvinas de Pinto, fue acusada del delito de homicidio calificado, agravado por el vínculo y deberá cumplir la máxima sentencia en el Penal de Mujeres de Santiago del Estero.
El espeluznante hecho ocurrió el 20 de abril de 2017, cuando la joven dio a luz a su hija y tras envolverla con una remera, la arrojó sin piedad en un basural municipal, donde finalmente la beba perdió la vida.
Al día siguiente, el cadáver de la pequeña e indefensa víctima fue encontrado por un niño cuando se dirigía a la escuela y un operario de la comuna reconoció la remera e informó a la policía que pertenecía a la mujer que semanas antes vio embarazada en la zona.
Fuente El Tribuno

