Un gurú de la India con 60 millones de seguidores, quien cumple una condena por violación, fue sentenciado por homicidio y podría ser condenado a la pena de muerte. En su contra hay otra causa por la castración de unos 400 fieles.
Gurmeet Ram Rahim Singh, de 51 años, es el líder del grupo Dera Sacha Sauda y se cree un mensajero de Dios en la Tierra. Pese a su fama y a sus excentricidades, el sujeto está en la cárcel, ya que en 2017 fue condenado a 20 años de prisión por un caso de violación.
Sin embargo, su historial delictivo es amplio y la Justicia lo encontró ayer culpable. junto a tres de sus colaboradores más cercanos, del crimen de un periodista cometido en 2002. El hecho se habría tratado de una venganza, ya que la víctima había publicado en un diario local una carta anónima que describía los abusos sexuales cometidos por Singh en su lujosa sede de su secta. Al trabajador de prensa lo acribillaron a la salida de su casa.
Por este homicidio, el supuesto religioso podría ser ejecutado.
Su repudiable prontuario tiene más capítulos. Desde 2015 hay otro juicio en marcha en su contra por castrar a 400 de sus seguidores, procedimiento que realizó para que estén más cerca de Dios. En medio de las críticas, la secta salió a respaldar al sujeto y detalló que esas prácticas estaban destinadas a «proteger a las mujeres de posibles avances sexuales».
Pese a todas estas aberraciones, en India destacan la labor social de sus seguidores, quienes se encargan de limpiar calles, donar sangre, colaborar en catástrofes y plantar árboles.
Amante de las motos y las joyas, cantante, actor y director de cine, el sujeto pasará un largo tiempo en la cárcel, a menos que la Justicia decida terminar con su vida.
