Por el momento sólo se conocían 5 casos pero el fiscal de la causa confirmó que se investigan más. Una supervisora habló sobre esta estremecedora situación y acusó a las autoridades del hospital.
El Hospital Materno Neonatal “Dr. Ramón Carrillo” de Córdoba, sigue en el centro de la escena nacional, al ser investigado por la muerte en circunstancias extrañas de cinco bebés recién nacidos. Aunque el número podría crecer.
Al respecto se expresó en las últimas horas Gladys Ríos, supervisora general del hospital, quien aseguró que las muertes de los pequeños son producto de “una mano negra” y denunció que las autoridades “encubrieron” los hechos.
La mujer dialogó con Clarín y reveló que dentro del establecimiento cuentan nueve casos sospechosos de muertes de recién nacidos sanos que desmejoraron rápidamente hasta morir.
El fiscal del caso, Raúl Garzón, confirmó esta información indicando que aunque son cinco los fallecidos “existe una sospecha fuerte de que sean entre 10 a 12? bebés con muertes dudosas.
«Las autoridades hospitalarias taparon todo desde antes de la noche fatídica del 6 de junio, donde tres casos de desmejoría al mismo tiempo provocó la intervención del Ministerio de Salud provincial», aseguró Ríos. “Cuando llegué a la mañana siguiente, mis compañeros lloraban.
«No sabés, Gladys, la noche que pasé, los bebés que se murieron’”, le dijeron.
«Las autoridades sabían que algo pasaba” detalló la mujer indicando que “en mayo, mandaron a cambiar los lotes de la vitamina K, un medicamento que se le da a los recién nacidos, no solo del área de neo, sino de todo el hospital”.
“No dieron a conocer nada de lo que pasaba. Esperaron a que fallecieran más chicos”, sostuvo y agregó que vio más maniobras extrañas: “Nos empezaron a entrevistar en absoluta reserva y nos dijeron que no podíamos hablar de nada de esto ni dar entrevistas”.